Gordito Relleno

Autores: Peñarroya.

País: España

Origen: Revista Pulgarcito (2ª época), nº 31 (Editorial Bruguera, Barcelona) , 30/01/1948

Desaparición: , 1975

Enlaces: Tebeosfera, Wikipèdia,

Artículos:

Les “tires”, a la postguerra espanyola. Terenci Moix. Tele/Estel, Barcelona. 1967

Gordito Relleno

Gordito Relleno es un personaje optimista por naturaleza, pero a quien la suerte le evita. Una criatura torpe tanto en sus relaciones sociales como en su actividad física, cuya benevolencia e ingenuidad genera el caos a su paso, siendo víctima en muchas ocasiones de la violencia física de sus semejantes. La comicidad de la serie se basa en explotar por un lado el enfrentamiento entre la ingenuidad, la buena voluntad y la confianza del protagonista en los demás, y por otro la dinámica insolidaria y hasta depredadora de buena parte de la sociedad en la que vive. Gordito es visto por sus prójimos como un pobre tipo y un infeliz. Su molesta bondad, que recuerda una actitud en desuso que complica el espíritu de supervivencia de la época, genera odio. “A veces hemos llegado a pensar que Gordito es, más que un personaje, un ‘marco’ o espejo donde se reflejan las miserias, la ‘mala leche’ y las frustraciones de amigos, conocidos y superiores”; así se explica Juan Antonio Ramírez en La historieta cómica de postguerra, un libro en el que este catedrático de Historia del Arte analiza los personajes humorísticos de Editorial Bruguera.

Gordito compartió con don Berrinche, protagonista de la serie Don Berrinche del mismo Peñarroya, varias páginas en los años cincuenta en las que no siempre el primero se convertía en víctima del segundo. Se trataba de dos personajes absolutamente distintos pero tal vez por ello complementarios.

Personajes

Gordito Relleno
Falto de mala fe, Gordito Relleno es un hombre sencillo, de inteligencia limitada, apacible, ingenuo, de muy buen talante y dispuesto siempre a ayudar. Es tímido con las mujeres pero osado cuando se trata de hacer el bien al prójimo, tan osado, que sus historietas suelen acabar mal para él precisamente a causa de su exceso de benevolencia.

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